VISUDDHA
EL PODER DE LA VOLUNTAD
El nombre en sánscrito es Visuddha que significa «Purificación». Guarda relación con el elemento Éter.
Los órganos asociados son el cuello, los hombros, los brazos y las manos. Las glándulas son la tiroides y las paratiroides.
El quinto chakra es el centro del sonido, la vibración y la expresión.es la energía del alineamiento con la voluntad Divina, de la entrega a la voluntad divina.
Si está bloqueado hay dificultad en la expresión, y estas en lucha entre si tu voluntad y la voluntad divina es la misma.
Todo son cosmovisiones, pero todo cuadra.
Hasta el tercer chakra, ahí encontramos una membrana que envuelve todas las vísceras, el peritoneo y eso está ahí como aislado, hay que atravesar esa membrana y el diafragma (es el musculo que separa por en medio a la persona, “por debajo del diafragma” y “por encima del diafragma”) lo único que atraviesa por ahí y con cuidado es el tubo digestivo.
Hay un “por debajo del diafragma” y un “por encima del diafragma”, hay personas que viven clarísimamente por debajo del diafragma y gente que vive por encima de él.
Que hay por debajo del diafragma: la supervivencia, la pertenencia a una tribu, el saber que tienes la comida que necesitas, que tienes un refugio, que sabes quién es el “macho-alfa” de la tribu, que sabes cómo relacionarte con él y que sabes cuál es tu posición dentro de esa tribu. Esto lo hace cualquier mamífero. Hasta el tercer chakra no somos diferentes a un león, ni una vaca, no somos diferentes de nada, somos un simple mamífero que se encarga de su supervivencia material, de su pertenencia a la tribu, de saber quién manda y de saber yo, donde está mi lugar.
Lo que nos hace humanos es atravesar el diafragma y llegar al cuarto chakra.
Atravesar este diafragma se le llama “rendición”, no saco la bandera blanca porque sé que voy a perder, sino que renuncio a toda violencia, renuncio a toda lucha, renuncio a pelear contra la vida, porque entiendo que donde hay violencia, no hay amor y si no hay amor, no voy a poder cruzar hasta donde hay amor.
Para poder encontrarme con el amor, primer tengo que cruzar esa frontera de decir “está bien, no lucho, no peleo” eso no significa que no sueñe, eso no significa que no viva, simplemente significa que renuncio a la violencia y que renuncio a querer controlar todo y que renuncio a querer tomar las riendas de todo en mi vida, porque entiendo que hay una sabiduría más grande.
El primer paso, en el que uno nota que ha pasado este diafragma, se llama Paz, porque el que no siente paz, tiene algún tipo de lucha y si tengo algún tipo de lucha, es que estoy luchando por mi supervivencia, por no estar solo, por relacionarme bien, por cual es mi lugar, por mi autoestima, todo eso me hace estar en lucha permanente y es una parte mamífera que vamos a mantener siempre, nadie puede dejar de ser mamífero, pero además hay la Paz del cuarto chakra, del corazón, que es la capacidad de decir “todo está bien”.
Para continuar nuestro camino, tenemos el quinto chakra, que es la constatación total, que es decir (es parte de la rendición) “todo está bien, más allá de la paz” como sentimiento de dejar de luchar, es el decir “me rindo a la vida, me entrego porque se, que hay una voluntad más grande que mi pequeña voluntad humana, que rige el universo”. Y si no me entrego, lucho y si lucho me atasco.
Por un lado es todo lo que no he dicho, todo lo que no soy capaz de pedir (mucha de esta responsabilidad es del segundo chakra, por eso esa relación tan grande entre el segundo y el quinto chakra) porque muchas cosas de las que no me atrevo a decir o pedir, es por miedo a perder, porque no encuentro el equilibrio, no soy suficientemente seguro como para saber que me tienen que amar por lo que soy y no por lo que vendo, si no es así, entonces me callo las cosas porque tengo miedo, o porque no se relacionarme adecuadamente o porque no se encontrar la manera adecuada de expresar, por eso el quinto chakra es la entrega.
Es el dominio de la conciencia que controla, crea, transmite y recibe las comunicaciones, tanto en nuestro fuero interno como en las relaciones con los demás.
Este chakra ocupa un lugar crucial como puerta entre la mente y el cuerpo.
Entre sus atributos figuran: el escuchar, el hablar, el escribir, el canto, la telepatía y todas las artes, en especial las que tienen que ver con el sonido y la palabra.
Este chakra ocupa un lugar crucial como puerta entre la mente y el cuerpo. A medida que ascendemos a los Chakras superiores, nos alejamos de lo físico. La comunicación es el primer nivel en que trascendemos lo físico. Es un acto de conexión. Es uno de los principios unificadores de los Chakras superiores. Es la transición de una dimensión a otra.
Este chakra es el puente entre el amor que emana del corazón y la sabiduría del intelecto. Es el vehículo de nuestros sentimientos y de los pensamientos que utilizamos para expresarlos.
Las cualidades del chakra de la garganta son: la verdad, la comunicación, la fuerza de voluntad, la creatividad y la integridad. Este centro fomenta la expresión emocional y espiritual. A través de él expresamos el amor, la alegría, el miedo y nuestras aspiraciones espirituales superiores. Las ideas, los sentimientos y las opiniones también encuentran forma en este centro.
Cuando nos lamentamos, nos quejamos, suspiramos, nos reímos o gritamos, el timbre, el tono de nuestra voz y las inflexiones del discurso reflejan si estamos abiertos o bloqueados. También nuestros silencios reflejan nuestro estado interior y la forma en que nos sentimos en relación con el mundo que nos rodea.
Cuando no somos capaces de hablar de lo que pensamos, dependemos de que los otros nos digan lo que deseamos. Esta represión, la negación resultante y la esperanza infantil de que los demás conozcan lo que deseamos y necesitamos, nos paraliza.
Por el contrario, el discurso nos libera, ofreciéndonos la capacidad de vivir nuestra vida y expresar nuestros pensamientos, ideas y sentimientos. Lo que se expresa verbalmente con palabras es nuestra intención consciente. Lo que se expresa con suspiros, es signo de que no se expresan abiertamente los sentimientos.
La mayoría de las personas no están preparadas para expresar la profundidad de sus sentimientos. Eligen la seguridad antes que la honestidad. Sus Chakras de la garganta se congestionan con la energía que finalmente llega a estancarse. Siempre que reprimimos nuestra verdad, nos sentimos impotentes. Expresarse es vital para las relaciones, por el respeto que se otorga a lo que uno piensa y siente.
Tenemos que encontrar el equilibrio entre lo que decimos y lo que sentimos que es correcto. Esto requiere madurez y no siempre acertamos. Pero nuestro sentido de la verdad se desarrolla y fortalece con el tiempo y la experiencia, de manera que seremos cada vez más capaces de discriminar quién o qué es más conveniente para nosotros.
En el centro de la energía que tanto tiene que ver con la comunicación existen dos arquetipos que están muy relacionados con la posibilidad de expresarse con claridad y en forma directa lo que se trata de decir.
Estos arquetipos son: el “Comunicador“ y el “Ser Enmascarado“
En el Comunicador, la forma adecuada de expresar la verdad se puede observar por la forma en que se comunica con los demás. Cuando se integra la espiritualidad con la conciencia sobre el flujo de la energía que circula por el cuerpo, ofrecemos a los sentimientos un espacio legítimo en el que puede expresarse. Esta práctica libera la energía y abre la mente, la garganta y el corazón. Se aprende a sentirse cómodo con el lado sombrío de la personalidad.
Los Comunicadores reconocen su derecho a expresar la cólera o su sentimiento de haber sido heridos, pero lo hacen de tal manera que no acusan a los demás. Integran corazón y mente en sus comunicaciones con los otros. Reconocen también el poder de la palabra hablada y escrita y, aceptando la responsabilidad de sus sentimientos, no abusan de ellas.
Cuanto más libres se sientan para expresar sus pensamientos y sentimientos, más reguladas estarán sus funciones emocionales y mentales. Cuanto más en contacto estén con lo que son, más familiar se tornará su voz interior. Cuando aceptan esta voz interior y se fían de ella, saben que proviene de un lugar de amor, paz y bondad, y que pueden actuar de un modo positivo y consciente.
En los Comunicadores lo que fortalece la garganta es una sólida voluntad, comprometida con la vida y con la expresión de sus verdades. Al defender sus principios, cuando el mundo intenta convencerlos para que sean diferentes a lo que en realidad son, revelan una sana consideración por la verdad.
También se requiere una firme sensación de integridad para mantener su ser interior intacto a través de los momentos buenos y malos de la vida, sin necesidad de culpar a los demás ni caer en la desesperación.
Es en este arquetipo donde necesitamos honrar nuestro compromiso espiritual, escuchar nuestra verdad interior, reforzar nuestra capacidad de amar y concentrarnos en nuestra experiencia.
Si hay pérdidas de energía en este chakra debido a la represión, la energía negativa se fijará en el cuerpo y formará la musculatura y el estilo del carácter de una persona. El arquetipo negativo asociado al chakra de la garganta es el Ser Enmascarado.
Es alguien incapaz de expresarse abierta y sinceramente. Cuando las personas están atrapadas en su negatividad no expresada, sus voces son crispadas, sus sonrisas forzadas y sus acciones revelan que han caído en la trampa de no expresar los sentimientos. Debido a su represión, puede sentir ira y resentimiento por situaciones que han pasado hace mucho tiempo.
Esta es la energía que estrecha las paredes de los vasos sanguíneos, eleva la tensión hasta niveles de estrés y desgasta el revestimiento del estómago. Esta energía nunca se elevará hasta la mente superior para ser expresada como pensamientos, opiniones o tomas de conciencia, y debido a esto se puede producir una inflamación de los tejidos, rigidez en los huesos y otros problemas derivados del bloqueo energético.
Esta energía desea ser liberada de un modo consciente, para dirigir esa toma de conciencia hacia un nivel más espiritual. Al no poder expresarse, la persona se deprime, se entristece, o se enfada y culpa a los demás por todo lo malo que le ha sucedido. Abandona la paz interior y erosiona la tranquilidad por el hecho de quedarse fijada a la negatividad y a los sentimientos densos y negativos. Esto reduce la energía y limita la capacidad para abordar el cambio.
Si siente que no merece el amor, el respeto ni la amabilidad, considera que los sentimientos no son importantes, por lo tanto evita compartir el ser interior con las personas más allegadas. Esto puede conducir al aislamiento, la soledad y la alienación. Limitamos el crecimiento personal y el desarrollo interno cuando se silencia nuestra opinión. Se ahoga con los sentimientos y sufre porque cree que no tiene el derecho legítimo de expresarse.
Características del Chakra:
- Demasiado abierto: es cuando el chakra gira a una velocidad excesiva. Produce personas que hablan en exceso, son dogmáticas, santurronas y arrogantes.
- Bloqueado: es cuando el chakra no gira o lo hace con demasiada lentitud. Produce personas que evitan la autoexpresión, que no tienen confianza y que mantienen opiniones incoherentes.
- Actitudes: la verdadera autoridad viene de alinearse con la voluntad de la Creación.
- Miedos: la idea de entregar su poder de elección a una fuerza divina sigue siendo la mayor dificultad para la persona que desea hacerse consciente.
- Fuerza: fe, conocimiento propio y autoridad personal, capacidad de tomar decisiones sabiendo que, sea cual sea la decisión, somos capaces de mantener nuestra palabra.
- Equilibrado: es cuando el chakra mantiene el equilibrio y gira a la velocidad correcta. Produce personas que son buenas comunicadoras, satisfechas, a quienes les es fácil meditar y son artísticamente inspiradas.