Como elegir un Terapeuta de Reiki
Tus impresiones:
¿Te cae bien?
¿Te inspira confianza?
¿Su manera de ser te agrada?
¿Te sientes tranquil@ en su presencia?
Experiencia:
No tengas reparo a la hora de preguntar cuánto tiempo lleva practicando Reiki, cuando empezó a dar sesiones de Reiki, y cuántos pacientes ha tratado.
No obstante, si esa persona te cae especialmente bien, si sientes una afinidad particular con esa persona, no dejes que su falta de experiencia te condicione demasiado, ya que a lo mejor “le has conocido por algo” y ese vínculo entre vosotros es el que te ayudará a mejorar, por poca experiencia que tenga.
Además, es aconsejable no hacer demasiado hincapié en tu enfermedad o dolencia en particular. Si el terapeuta nunca ha tratado tu problema, no significa que no te puede ayudar. Reiki equilibra a la persona, independientemente de los síntomas, por lo cuál buscar alguien que tenga experiencia específica en tu dolencia no es de gran utilidad.
Testimonios:
Las creencias personales del Terapeuta y las tuyas:
Ten en cuenta que Reiki no tiene dogma, filosofía, creencias religión etc. Reiki es un método de canalización de energía desarrollado para el uso en clínicas del Japón con fines terapéuticos.
Puede ser que el terapeuta mezcle sus propias creencias religiosas o sus propios dogmas con Reiki. Esto no es necesariamente “malo” ya que hay grupos de católicos, por ejemplo, que usan Reiki dentro de un marco religioso haciendo mucho bien.
Pero ten presente que sus creencias pueden “chocar” con las tuyas y que no tienen nada que ver con Reiki. Son sus creencias personales. Si no te sientes comod@ con su enfoque particular, a lo mejor no es el terapeuta para ti.
Expectativas:
Por esta razón, un terapeuta difícilmente puede emitir un juicio sobre si vas a mejorar o no, y cuánto tiempo tardarás. Hacerlo, es darte falsas expectativas que pueden no ser aplicables a tu caso en particular. Puede usar otros pacientes como ejemplo, pero matizando que no sabe si los ejemplos se aplican a ti.
Diagnósticos:
Si tienes síntomas físicos de cualquier tipo, consulta tu médico o un especialista.
Además, un terapeuta no debe “decirte como estás”. Un terapeuta puede ayudarte a interpretar tu proceso basado en lo que tu percibes, pero “diagnosticar” tu estado físico, anímico o energético no corresponde a su labor y puede ser contraproducente a tu proceso, porque por una parte puede estar equivocado, ya que su opinión es subjectiva, y por otra parte te está quitando una valiosa oportunidad para entrar en contacto contigo mism@ si te dice lo que te pasa.
Consejos y opiniones sobre medicación y otros tratamientos:
Un terapeuta de Reiki nunca debe opinar sobre la medicación que estás recibiendo, ni aconsejarte sobre tratamientos de otro tipo, sobre todo médicos, al menos que no sea médico o diplomado en la materia que engloba los otros tratamientos.
Combinación con otras terapias:
¿El terapeuta combina su terapia con otras técnicas? Esto no quiere decir que las otras técnicas no sean válidas, pero te deben informar para que estás pagando, si es Reiki o si es algo diferente.
¿Es realmente Reiki?:
Hay otras técnicas de canalización de energía que no son Reiki. No significa que estas técnicas no sean válidas, pero con Reiki tienes ciertas garantías que la energía que vas a recibir es siempre del mismo tipo, la energía de la Fuente, sea quien sea que lo canaliza.
Pide un Diploma del curso de Reiki del terapeuta si tienes alguna duda, o busca en la base de datos de la web de la Federación, para comprobar si el terapeuta es Federado.
Titulación:
Reiki funciona con niveles, desde el primer nivel hasta el tercer nivel y Maestría. Aunque es posible que un terapeuta de Reiki sea muy buen terapeuta con solo el primer nivel, lo lógico es que haya adquirido por lo menos el segundo nivel antes de pensar en tratar a los demás y considerar Reiki como su profesión.
Seguimiento:
También pregunta por la frecuencia de las sesiones. Lo habitual es una por semana, pero es sólo una regla general. Puede ser que aconseje más sesiones por semana si la dolencia es urgente o estás con mucho dolor.
Enfoque sobre auto sanación:
El terapeuta no te sana. Tu te sanas a ti mism@, usando la energía que el terapeuta te brinda.
Si oyes frases como “yo te voy a curar”, o “yo te voy a quitar tu enfermedad” etc… huye de esta persona, ya que no entiende el concepto de dar Reiki.
Duración de sesión:
Además, asegúrate que se especifica el tiempo que se da Reiki, comparado con el tiempo de la sesión entera. Puede ser que el terapeuta combine Reiki con otras terapias, o que haya un momento para hablar antes y después (ver arriba, Combinación con otras Terapias).
Esto evita que, si por ejemplo el terapeuta es psicólogo, estés pagando para recibir una hora de Reiki cuando en realidad son 50 minutos de psicoanálisis y 10 minutos de Reiki.
Tarifas:
No obstante, asegúrate que las tarifas son claras y transparentes, que no hay “gastos ocultos” o gastos adicionales.
Pide información sobre las tarifas. Como cualquier consumidor, es tu derecho.
No olvides que “la voluntad” es justamente eso, una donación voluntaria cuya cantidad tú especificas.
Ten cuidado si el terapeuta te exige un gasto adicional como parte “esencial” de tu terapia de Reiki, para otro tipo de tratamiento. Pregúntale porque es esencial, ya que aunque Reiki se complementa con muchas terapias, no es imprescindible ningún tipo de terapia adicional para que Reiki sea efectivo.
Puede ser que el terapeuta te aconseje un tratamiento adicional, tipo acupuntura, flores de Bach, psicoanálisis etc. pero no constituye parte de la terapia de Reiki, es algo separado, y el terapeuta debe especificarlo.
Fuente: John Curtin. Maestro y Terapeuta de Reiki. Presidente de la Federación Española de Reiki.